TL;DR. Lionel Hutz fue un genio.

Hola, hola, perinolas! Mucho tiempo sin la tercera parte. Lo siento. No, en realidad no lo siento. Me da lo mismo. Pero igual me da la impresión de que alguien lee este blog así que continuaré escribiendo mis súper aventuras.

Atención: este post tiene muchas imágenes.

Un lugar súper pintoresco que prometía vender el completo más grande del mundo. Se nota que nunca han ido a la calle Gorbea.

Vamos por parte: Esa cosa que venía dentro del papel al final costaba más de luca, y era terrible chico. Segundo: la bebida era una Pepsi de Vainilla que tenía sabor a mitjans con coca cola, pero sin alcohol. Nunca más volví ahí ni se supo del lugar y fin de la historia.

Pero no todo es malo. He comido distintos tipos de comida:

Burritos

Comida vietnamita

Comida china

Tacos

Y creo que eso es todo, porque he comido burritos toda la semana, creo.

El otro día en la mañana cuando iba a tomar el shuttle para ir a la U, me topé con una huelga con marcha.

Espera, no, esa no era la foto. Esta es:

Fue tan tranquila y feliz que parecía que lo hacían por hobbie. Hasta los policías sonreían y la pasaban bien. Y como me contaron por ahí, los TA (Teaching Assistant) también hicieron una huelga porque les pagaban muy poco (ojo ahí Beauchef (!)).

Ya, al punto de este post. Me dieron una pista de por qué todo es tan perfecto aquí. De por qué los baños tienen agua tibia. De por qué a los discapacitados SI los toman en cuenta (no de la forma que cierto genio creyó que sí lo hacían en Beauchef) teniendoles estacionamientos realmente destinados a ellos, rampas en todas las veredas, entrada especial en todos los buses, botones para abrir las puertas automáticamente, etcéteratata.

Aun lloviendo, todos esperamos afuera del bus mientras no se hubiera subido primero el de la silla de ruedas. Después de que nos mojamos un buen rato (parece que el chofer lo hizo a propósito) subimos todos ordenados.

De por qué la gente es simpática, pero distante. De por qué los conductores de autos son tan buenos conductores y amables con los pedestrian. Y eso es, señoras y señores, afírmense, en cierta medida, por los abogados.

“Bien por ti, muchacho. Lo que necesita este país es más abogados. ¿Te imaginas un mundo sin abogados?” – Lionel Hutz, abogado.

Es cierto, acá todo el mundo se demanda por todo. Si te miran feo, llama a tu abogado! Podrás ganar millones!. Como todos están asustados de que alguien los demande (“pero cómo no hay accesos para sillas de ruedas! llamaré a mi abogado”, “esta bebida está tibia! abogado”, “me rompí una uña, alguien tendrá que pagar por esto”), es que todos cumplen las reglas. Viven en una armonía mínima. El sueño de Calvino.

Bonus track: Sí, los vi, y aquí están.